domingo, 28 de enero de 2018

LA JORNADA EDUCATIVA

Volvemos con muchas ganas, y la primera propuesta de nuestro autor se centra en las posibilidades que nos ofrece una jornada escolar ¿Es más adecuada una jornada partida o una continua? Vamos a ver que nos cuenta Alejandro:

Lo primero, Feliz Navidad  y Feliz Año Nuevo.
En la entrada de hoy, vamos a debatir sobre si es mejor la jornada partida o la jornada continua, ya que en mi colegio, el jueves día 18, los padres votarán si en infantil y primaria se cambia el modelo actual,  que es jornada partida.
Os daré algunos datos acerca de mi colegio:
En infantil y primaria, actualmente,  el horario es de 9:30 a 13:00 y de 15:30 a 17:30, en cambio en la ESO, el horario es de 8:00 a 14:00.
El nuevo horario para infantil y primaria sería: de 9:00 a 14:15, clases (obligatorio) , de 14:15 a 16:00, comedor (opcional) y por último de 16:00 a 17:00 talleres gratuitos (opcional).
En Palencia, a día de hoy sólo queda un colegio que no ha dado el salto a jornada continua, y ese es el mío.
Os plantearé una serie de argumentos a favor y en contra, a ver qué os parece:

JORNADA PARTIDA
A FAVOR:
Sin duda, la mayor ventaja de la jornada partida, es la posibilidad de poder descansar al mediodía. Muchos niños, que llegan fatigados, seguro que lo agradecen.
Durante la jornada partida, por la mañana, pasan tres horas y media desde el desayuno a la comida, incluyendo un almuerzo a media mañana. Gracias a ello se pasa sin comer el tiempo recomendado.
EN CONTRA:
Recuerdo mis seis años en primaria y el horario me parecía un rollo, llegar a casa, hacer mis deberes, comer y vuelta al cole. El tiempo de la comida se me pasaba volando.
Hay una cosa que me molesta muchísimo en mis partidos de fútbol y es el descanso. Para mucha gente, es un alivio, para mí no. En el momento en el que me ya me he metido en el partido, lo paran. Pues con las clases me pasaba igual. En primaria, en la primera hora de la mañana estás dormido, en la segunda ya mejor, en la tercera ya vas a tope y te paran. Luego vuelves por la tarde y ya no da tiempo a coger esa carrerilla.
Salir a las 17:30 hacía que las extraescolares tuvieran que comenzar a esa hora como muy pronto, con lo cual el tiempo libre o para hacer deberes era menor. Es verdad que había gente que los hacía al mediodía, pero el día que no podías… Te quedabas sin tiempo libre.


JORNADA CONTINUA
A FAVOR:
El rendimiento de los niños es mayor si la jornada es continua y no se detienen para descansar. Está demostrado que su atención durante las primeras horas de la mañana es mayor.
Terminando a las 14:00, nuestras actividades extraescolares se pueden desarrollar durante toda la tarde y tenemos más tiempo libre.
Concentrar las horas colegiales durante la mañana, hace que los padres puedan organizarse mejor y no tengan que llevar a los niños dos veces al colegio, lo que puede suponer un problema para ellos.
EN CONTRA:
Hay quien afirma que ir 6 horas seguidas al colegio cansa y hace que los niños rindan peor.
Los niños comen más tarde, lo que es menos recomendable para su salud.

SISTEMAS EDUCATIVOS POR EL MUNDO
Según la revista “Forbes” los tres mejores sistemas educativos del mundo son los de  Bélgica, Suecia y Finlandia. Os informo:
BÉLGICA
En Bélgica, el horario es de jornada continua, clases de 8:00 a 3:00 .
SUECIA
El colegio comienza sobre las 8:00  y acaba sobre las 14:00 o las 15:00, dependiendo de la edad, así que también es jornada continua.
FINLANDIA
Todos hemos oído hablar del maravilloso sistema educativo finlandés.
En Finlandia, también tienen jornada continua.


MI OPINIÓN
Como hemos visto, en los tres mejores sistemas educativos del mundo, la jornada escolar es continua. Eso, en principio, demuestra que es un método muy eficiente.
Yo he tenido jornada partida y continua, en primaria y la ESO respectivamente. No sé si la jornada continua será la más productiva, pero si es la que más me ha gustado. En primaria, el tener que ir dos veces a clase, me producía una sensación muy amarga. En la ESO, me canso muchísimo menos yendo a clase una sola vez, es más tiempo, pero no se nota.
La verdad, no me importa el resultado de la votación, yo ya he pasado la etapa de primaria y aunque tenga una hermana cursándola, tampoco creo que vaya a cambiar mucho mi rutina. Si hubiera coincidido con mi tiempo en primaria, hubiera llorado a mis padres para que votaran jornada continua. Por fin, en Maristas, han decidido dar la oportunidad de votar.

¿Y vosotros, que tipo de jornada preferís?


Bastante interesante la propuesta que ha hecho mi compañero. Voy con mi parte:


En primer lugar, quería comenzar disculpándome con mi compañero de batalla. Os puedo asegurar que este tema lo tenía preparado a tiempo para su publicación (ha sido puntual con su entrega), pero parece que se me está complicando mi parte de la tarea. Mi falta de inspiración y de compromiso en estas semanas me está pasando factura. Intentaré analizar qué está pasando para buscar soluciones porque lo tengo claro, este proyecto merece la pena.

Centrado ya en la entrada de hoy... ¡Qué tema tan interesante! Me dice este hombrecillo (ya le va cambiando hasta la voz, es muy gracioso) que me incline hacia una u otra, y la verdad, no lo tengo muy claro. ¿Jornada partida o continua? Encima en mi colegio acabamos de debatir y votar sobre ello.

Como estudiante, no tengo ninguna duda. Mi decisión se decantaría por la jornada continua. Haciendo un esfuerzo tremendo en recordar cuando yo viví esto de ir a clase a que me soltaran todo tipo de "chapitas", uno de los esfuerzos que más hacía y más me costaba era convivir con un horario de mañana y tarde. Me vienen a la cabeza las eternas luchas en las que tenía que combatir contra el sopor de las 15:30, el desánimo de tener que volver rápidamente a clase sin poder disfrutar de un tiempo de desconexión, de salir prácticamente de clase con la noche encima, de tener la sensación que los días eran muy cortos ya que apenas teníamos tiempo (entre que llegábamos, tareas otras actividades,...) se nos iba rápidamente el día y vuelta a empezar. Lo único que me gustaba de ir en ambos momentos del día era poder estar con la gente que me encontraba, pero como íbamos a clase, tampoco era algo primordial ni muy motivante con el paso de los años.

Mis sensaciones cambiaron cuando ya entrando en BUP o COU (sí, soy de las últimas promociones que estudió EGB y esas cosas), dedicando solamente la mañana a trabajar. Posiblemente, puedes pensar que estoy disfrazando un ataque premeditado contra la jornada partida, pero sí que recuerdo que prácticamente todo eran ventajas: mayor tiempo para organizarme (lo justo, que zanganeaba mucho), disfrutar de las tardes y de varias actividades mezcladas con las famosas tareas o alguna que otra siesta, mayor sensación de aprovechamiento del tiempo (por las tardes también había luz natural del sol),... 

Como profesor, o medio profesor (mejor dicho), pues tengo mis pros y mis contras de cada una de ellas.

¿Qué aporta la jornada continua? Sobre todo, concentrar todo el trabajo en un bloque de mañana, que permite liberar a nuestros alumnos de esa carga por las tardes. Es cierto que supone un esfuerzo extra, ya que al estar todo concentrado en un mismo gran bloque, pues también llega a pesar en su atención, pero a pesar de todo, creo que compensa.

Otro de los argumentos que expongo tendría que ver con la conciliación familiar. El hecho de tener solamente ocupada la mañana, puede permitir que cada casa pueda disponer de mas tiempo para estar juntos (claro, también añado que solamente lo pueden hacer los que tengan un horario similar porque para otros tantos se complica más la situación).

Una tercera ventaja sería la organización de las tardes. Los alumnos pueden gestionar de una manera más productiva este momento, sin tener que organizar sus actividades con una franja horaria tan apretada, facilitando la hora de irse a dormir, dedicando un tiempo más holgado y descansado para sus tareas.

Por último, ahora solo pensando en los profes, pues nos vendría bien disponer de un espacio más prolongado para poder programar y organizar la cada vez más complicada vida colegial y educativa, contar con más espacios liberados para reunirse y evitar tanto concilio en los pasillos.

¿Hay algo en contra de este tipo de jornada? Pues no mucho, pero se me ocurre que el esfuerzo considerable que hacen los alumnos para aprender lo mismo en menos tiempo y con un horario más pequeño no creo que sea una ventaja para ellos. Seguro que el grado de atención es una dificultad que tendríamos que enfocar de alguna manera para evitar que les pase factura. 

¿Y la jornada partida? Pues según os contaba mi experiencia y la que he visto en varios de los alumnos de los últimos años, se podrían sacar los argumentos a favor y en contra de esta postura, pero creo que por lo que he detallado, ahora mismo, y sin tener una experiencia docente en la jornada continua, me posiciono a favor de intentarlo. 

Viendo la experiencia de estos años de "luchas internas" dentro del colegio por una u otra, también extraigo varias conclusiones:

-Creo que no hay una jornada única infalible. Ambas aportan beneficios a los alumnos ni ningún planteamiento científico ha desmontado claramente a la otra. Aunque es un tanto extraño que los profesores, por norma, tan solo nos posicionemos en la jornada continua ¿miramos solo por los alumnos o estamos anteponiendo otros intereses (esta pregunta puede escocer)?

-El planteamiento de la decisión está condicionado en función de la situación familiar que existe en cada hogar. Y en cada caso, creo que el colegio debería dar respuesta a las necesidades personales ¿Dónde está el límite? Buena pregunta...

-Creo que el planteamiento de la jornada continua en nuestra región tiene que ver más con una moda y con el contexto social y económico en el que nos desenvolvemos, por lo tanto, lo ideal es que cada centro pudiera adaptarse a las realidades en las que se desvuelve.

Vamos a ver qué resulta....